Publicado el 28 de Junio, 2022

La primera respuesta es sencilla: si te lo puedes permitir, compra uno nuevo, porque al recargar el tóner, los cartuchos van acumulando una capa de residuos que pueden afectar negativamente al funcionamiento de la impresora y, por lo tanto, de la impresión.

Nuestro consejo, ante las posibilidades de comprar uno nuevo original, uno compatible o recargar, te recomendamos una solución combinada para que sacar el máximo partido a la impresora y cuidarla.

Compra un tóner compatible que siempre te saldrá mucho más económico que el original y las diferencias en la calidad de la impresión son muy pequeñas.

También, si eres de los que usas mucho tu impresora, te recomendamos combinar la compra con las recargas.

El problema de las recargas es que los cartuchos acaban acumulando una capa de residuos que manchan y acumulan el polvo residual.

Para evitar esto, o como medida de prevención, te aconsejamos que de vez en cuando abras tu impresora y quites el polvo tú mismo, ya sea con un pequeño aspirador o paño en las partes externas del tóner.

Y así, mezclando el uso de comprar tóners compatibles y recargables, evitamos perjudicar a nuestra impresora. Siempre hablamos de un uso muy continuado, diario.

Es evidente que la compra de un tóner compatible saldrá mucho más económica que la de un original. Existen en el mercado unas opciones muy interesantes, de gran calidad y que no nos darán ningún problema al ser realmente similares o semejantes a la calidad del original.

Dejado este punto claro, respondamos a las preguntas: ¿cuántas recargas admite un cartucho de tóner? ¿Cuánto me costaría recargarlo?

Un cartucho de tóner está dividido en una serie de componentes que están sometidos a un trabajo de fricción y desgaste durante el proceso de impresión. Por lo tanto, sufren un deterioro que acaba provocando fallos en las impresiones.

Los kits de recarga que existen hoy en el mercado, nos informan del número máximo de veces que podemos recargar un cartucho sin llegar al nivel crítico de desgaste que provocaría un fallo.

Para hacernos una idea, aproximadamente, un cartucho de tóner que tiene un rendimiento de hasta 5.000 páginas se puede recargar hasta tres veces. Y un cartucho que imprime entre 5.000 y 10.000 copias lo podríamos recargar de una a dos veces.

Hay que remarcar, y no olvidar, que existen en el mercado cartuchos de varias marcas (Kyocera, Oki, Epson…) que pueden ser recargados infinidad de veces. Esto es posible ya que sus cartuchos de tóner son sólo contenedores de la carga de tóner. En estos casos podremos recargar el cartucho tantas veces como queramos.

Pero recalcamos, un cartucho de tóner no tiene una vida ilimitada, antes o después habrá que sustituirlo por un cartucho original, o por uno compatible, para que no sufran los componentes del tóner y de la impresora.

Si queremos ahorrar, desde aproximadamente 6 hasta 13 o 14 euros, según marcas y modelos, podemos recargar nosotros mismos el tóner y estaremos listos para imprimir.

Para rellenar el tóner, nuestro consejo es buscar un tutorial en YouTube adaptado al modelo de tu impresora y seguirlo paso a paso. El tiempo que nos puede llevar en recargarlo será de apenas 15 minutos, por lo que merece la pena.

Resumiendo, las recargas de tóner son una gran opción, pero sé limpio y listo, cuida tu impresora con puestas a punto de limpieza para sacar el máximo rendimiento sin perder calidad.

Artículo Original: Green Printer